Uno de estos sistemas es el concepto de redes sociales. El auge de Facebook (ahora Meta), LinkedIn y similares anunció una era de interacciones entre personas de todo el mundo en tiempo real. Se inició una revolución de dispositivos conectados conocida como Internet de las Cosas (IoT).
Desde los teléfonos inteligentes a los televisores conectados, los dispositivos conectados a Internet han permitido a la gente experimentar la vida desde cualquier parte del mundo con nuevos amigos en lugares distantes. La ciencia ficción es ahora un hecho de ingeniería con el auge de la Web 2.0.
Una de las repercusiones empresariales más profundas de la Web 2.0 es el uso de plataformas colaborativas. En concreto, Microsoft Teams, Slack y Zoom, entre otras, han permitido a las empresas trabajar desde cualquier lugar. Esto se ha acelerado en los últimos años debido al impacto de la pandemia mundial.
¿Qué significa la Web 2.0 para las empresas?
Para los tecnólogos, la Web 2.0 crea oportunidades para la creación de empresas completamente nuevas que operan principalmente en Internet. Muchas, como Amazon, han evolucionado desde sus raíces en Internet hasta las tiendas físicas. Otros, como Netflix, han pasado de construirse en una tienda física a servir a sus clientes a través de Internet.
Al igual que los negocios siguen evolucionando en el mundo real, también lo harán en Internet. Muchas empresas han perfeccionado las operaciones comerciales híbridas para adaptarse a las preferencias cambiantes de clientes y consumidores.
La telemedicina es un ejemplo de este cambio. En la actualidad, muchos médicos y sistemas hospitalarios conectan por videoconferencia a médicos y pacientes para tratar sus problemas de salud. Esta innovación, que ahorra tiempo, permite a los profesionales sanitarios evaluar la necesidad de una visita en persona y de evaluaciones de seguimiento.
Las entidades financieras están haciendo lo propio con ofertas híbridas. Para complementar las sucursales físicas, los bancos, las cooperativas de crédito y otras instituciones financieras ofrecen ahora aplicaciones basadas en teléfonos inteligentes y sitios web interactivos. Los clientes ya no tienen que desplazarse hasta una sucursal para ingresar un cheque, sino que pueden hacerlo con unos pocos clics y fotos directamente desde un dispositivo móvil.
¿Hay algún inconveniente en la Web 2.0?
La Web 2.0 también conlleva riesgos. Las empresas, los clientes y los socios deben comprender los riesgos de hacer negocios en línea y participar en la naturaleza centrada en los contenidos de la Web. La preocupación por la seguridad es hoy más importante que nunca, así como el posible daño a la reputación que se deriva de tener presencia en Internet.
Tanto las empresas como los particulares deben comprender el equilibrio entre riesgos y beneficios de la vida en la Web 2.0. Una buena forma de ver la Web 2.0 es la cita del tío de Spiderman (o Peter Parker): "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad".
¡Disfruta de la Web 2.0 y hazlo con responsabilidad!
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