Acabar con los estereotipos, gestionar el tiempo y contar con una red de apoyo
La gestión eficaz del tiempo se convirtió en mi arsenal durante este proceso. El tiempo dedicado a todas mis responsabilidades profesionales y personales acabó con los estereotipos sobre el papel de la mujer en el trabajo y en casa. El apoyo inquebrantable de mi familia y mis colegas, sobre todo teniendo en cuenta la escasez de mujeres que obtienen este título, desempeñó un papel crucial en mi capacidad para desenvolverme tanto en el ámbito profesional como en el personal.
Resiliencia ante los retos
En medio de la desafiante evaluación PSM III y la adición de algunos requisitos al viaje PST, así como los elementos mencionados anteriormente, mi determinación se mantuvo resistente, haciéndose eco de la fuerza de las mujeres que desafían las normas. Cada reto, en lugar de ser un contratiempo, se convirtió en una oportunidad para desafiar los prejuicios y redefinir las expectativas. No se trataba sólo de las expectativas que tenía de mí misma, sino también de las que los demás tenían de mí.
Navegar por cimas más altas a través de las evaluaciones
Las evaluaciones, en aquel momento, se publicaron como algunas de las más difíciles en el campo de Agile. Me costó dos intentos superar la PSM. Como una de las pocas mujeres que buscaban esta certificación, cada prueba se convirtió no sólo en una medida de conocimiento, sino en una demostración de las capacidades de las mujeres en campos desafiantes.
Al final, este viaje de 18 meses no fue solo un triunfo personal, se convirtió en una declaración. Puso de manifiesto que las mujeres fuertes y con vocación profesional también pueden navegar por el intrincado terreno de las certificaciones, rompiendo techos y allanando el camino a los demás. La gestión del tiempo, una red de apoyo, mentores y una determinación inquebrantable no fueron sólo herramientas, sino instrumentos de empoderamiento.
Consejos a las mujeres profesionales
A las mujeres aspirantes a profesionales que se plantean una odisea similar, que este viaje les sirva de testimonio de que su familia, sus responsabilidades domésticas y laborales, su género y, lo que es más importante, ustedes mismas, no limitan su ascenso. Acepta los retos, apóyate en tu red de apoyo y deja que tu determinación redefina las expectativas.
La certificación, en este contexto, no es sólo una medida de conocimiento, sino una declaración de que las barreras están para ser derribadas. Como una del pequeño porcentaje de mujeres PST certificadas, no sólo llevo conmigo el conocimiento y la experiencia, sino también el legado de desafiar los estereotipos e inspirar a otros a seguir sus propios caminos.
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